Este blog nació cuando Mariano
Rajoy (en la imagen corbata negra de luto electoral) se situó al frente del Gobierno
en 2011. Han transcurrido dos legislaturas para las que muchos españoles
tuvieron que comprar un kit de supervivencia.
¿Cuántas veces se le ha dado
por muerto a Rajoy? Incontables desde que anunciara su política de mano tendidaque nunca cumplió. Ahora tras el fiasco en Catalunya del Partido Popular –tan cantado
como el mantenimiento del bloque nacionalista- se le presenta como un cadáver
político. Lo amortizan analistas que llevan enterrándolo estos últimos siete años.
¿Acertarán en sus
predicciones? Por desgracia, no. Y todo porque, no nos engañemos, seguimos sin
alternativa. El cadáver andante se ha
encargado de descabezar a la oposición en España. Ha dejado tocado a Pablo Iglesias que también ha sufrido la derrota de su En Comú-Podem en Catalunya. El PSOE de Pedro Sánchez se ve lastrado por la caída del PSC de Iceta y de IU poco se puede decir.
Ahora en este tiempo muerto en que hemos entrado se anunciarán negociaciones sobre y bajo la mesa y se dará un papel estelar a los conciliadores. Asistiremos al espectáculo de los mediadores que tratarán de tender puentes entre una España ninguneada y unos nacionalistas crecidos pero sin oxígeno para encarar la independencia. Entre medias, Catalunya una y otra vez golpeada.
Ahora en este tiempo muerto en que hemos entrado se anunciarán negociaciones sobre y bajo la mesa y se dará un papel estelar a los conciliadores. Asistiremos al espectáculo de los mediadores que tratarán de tender puentes entre una España ninguneada y unos nacionalistas crecidos pero sin oxígeno para encarar la independencia. Entre medias, Catalunya una y otra vez golpeada.
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