Los empresarios europeos y norteamericanos salvan sus diferencias en favor de un acuerdo transatlántico

 Líderes de los Estados Unidos y la Unión Europea se reúnen en Bruselas para forjar un consenso sobre una agenda común e impulsar las relaciones transatlánticas. Los empresarios europeos y norteamericanos se muestran dispuestos a buscar soluciones a las disputas comerciales y orillar sus diferencias, incluidos los polémicos aranceles, según reconocen en sendos comunicados.

Desde la Mesa Redonda de Industriales Europeos (ERT, por sus siglas en inglés) acogen con satisfacción las medidas adoptadas recientemente para abordar las controversias bilaterales. “Apreciamos los renovados esfuerzos para resolver la disputa Boeing-Airbus, y apoyamos la eliminación de los aranceles sobre el acero y el aluminio y los aranceles de represalia”, señalan en una declaración. Por su parte, el director general de la patronal europea Business Europe, Markus J. Beyrer, apoya en video la colaboración conjunta entre los Estados Unidos y la UE y explica los beneficios del acuerdo comercial trasatlántico.   

En los últimos años miembros de la sociedad civil representados principalmente por organizaciones de activistas, sindicalistas y ONGs se han posicionado en contra de los Tratados de Libre comercio que negocian Estados Unidos y la Unión Europea, conocidos popularmente como TTIP.

En medio de una pandemia mundial con un impacto social y económico devastador, la fuerte respuesta política en la Unión Europea y los Estados Unidos ha sido fundamental para capear la tormenta. “Nuestras economías están tan estrechamente entrelazadas, a través de flujos mutuos de comercio e inversión, que ambos socios deben seguir cooperando estrechamente. La relación transatlántica es la columna vertebral de la economía mundial y, como tal, una asociación sólida entre la UE y los EE. UU. es fundamental para una recuperación mundial exitosa”, señala en su comunicado la Cámara de Comercio norteamericana en Europa que defiende los intereses de sus empresarios en Europa.

Las prioridades para los empresarios norteamericanos se centran en los siguientes puntos: 

-          Abordar las disputas comerciales existentes (subsidios para aeronaves, así como aranceles de acero y aluminio de la Sección 232). Los anuncios recientes que evitan la escalada demuestran el compromiso de ambas partes con un diálogo positivo que puede conducir a una resolución rápida y encontrar formas de evitar que surjan nuevos factores irritantes en el futuro.

-          Negociar un mecanismo sostenible para transferencias transatlánticas de datos que reemplace el Escudo de privacidad. El Escudo de la privacidad ha demostrado ser una herramienta importante para que más de 5.000 pequeñas y grandes empresas transfieran datos personales a través del Atlántico.

-          Centrarse en cuestiones emergentes en las que la UE y los EE. UU. tienen la oportunidad de establecer los estándares globales del futuro (inteligencia artificial, tecnología limpia, etc.). Los empresarios norteamericanos apoyan las iniciativas que buscan facilitar una conversación transatlántica, como el Trade and Technology Council o la Green Tech Alliance.

-          Cooperar en la reapertura de nuestras economías, incluida la eliminación de las restricciones de viaje. Como empresas globales que operan en Europa, confiamos en los viajes de empleados de fuera de la UE. Apoyamos el certificado COVID digital de la UE y daríamos la bienvenida a la creación de un sistema transatlántico, que permitiría levantar las restricciones de una manera segura y coordinada.

Industriales europeos exigen respuestas innovadoras y alineadas

Los industriales europeos, miembros de ERT, consideran que la incertidumbre geopolítica, la crisis del COVID-19, las perturbaciones económicas, el cambio tecnológico y el cambio climático exigen respuestas innovadoras y alineadas. Consideran que actuando juntos, la UE y los Estados Unidos pueden contribuir a una recuperación global sostenible, incluida la implementación del Acuerdo de París, construir una economía transatlántica más fuerte, dar forma a los estándares a nivel mundial, aumentar la resiliencia en las cadenas de valor y fortalecer las instituciones multilaterales y las reglas globales. 

“Necesitamos un acuerdo multilateral en la OCDE sobre cuestiones tributarias que derogue y evite las acciones unilaterales perturbadoras y evite represalias y otro conflicto comercial. Dado que las empresas y los consumidores dependen fundamentalmente de los flujos de datos internacionales, es igualmente importante lograr un acuerdo sostenible para la transferencia de datos personales que reemplace el Escudo de privacidad”, señalan en  su declaración los industriales asociados a ERT.

“El logro de resultados en estas áreas también puede promover una agenda estratégica y con visión de futuro más integral. Estamos firmemente a favor del establecimiento de una plataforma dedicada a la colaboración en temas clave como las transiciones verde y digital, la mejora del comercio bilateral y la cooperación regulatoria, y la modernización y revitalización de la OMC y el comercio basado en reglas”, reconocen los firmantes de esta declaración entre los que se encuentran los CEO de grandes multinacionales.